Ya estamos a julio y yo con esos pelos. ¿Recordáis la película Hairsprayy? Me refiero a la primera, a la buena, la que dirigió ese histrión norteamericano llamado John Waters en el año 1988, el "Almodovar" de Hollywood. Os refresco la memoria:
Es lo que aparenta. Una versión sarcástica, golfa y deliberadamente kitsch de un período idealizado en el cine americano. Quizás ésto no tiene mucho que ver con la entrada, pero no puedo dejar de pensar en esa película cuando veo la estética rotunda y sin complejos de Candye Kane, una de las mejores cantantes blancas de blues en la actualidad. Ojalá por mucho tiempo, ya que se está recuperando de un cáncer que se le declaró hace apenas dos años.
En inglés se le da el nombre de candy cane a lo que aquí llamamos bastones de caramelo. Nada menos dulce que la vida de esta chica de Los Ángeles que luchó lo indecible para alcanzar reconocimiento en el mundo del espectáculo. Lo intento con todas fuerzas porque quizás sabía que no tenía mucho que perder. Fue stripper, hizo porno, adornó con sus atributos las revistas para adultos y algún libro de arte, estuvo en grupos del movimiento punk, y sobre todo, nunca ha tenido excesivos prejuicios. ¿Podría permitírselos?
Un estilo que bebe de todas las fuentes: el blues de Chicago, el jump blues de los 50, el swing clásico, el jazz vocal. Miles de kilómetros actuando en toda clase de recintos: desde antros inmundos hasta las grandes salas de espectáculos o la televisión; pero siempre, por encima todo, caiga lo que caiga, un contagioso e irresistible sentido del humor. Humor a prueba de bombas. No hay otro posible en su caso.
Candye siempre supo que era luchar. Era una pequeña ladronzuela a los 9, pandillera a los 15, madre soltera a los 17 y conociendo el mundo como lo conoce ella, siempre ha sido una defensora acérrima de los derechos de los desposeídos: trabajadoras del sexo, gays y lesbianas etc.... Si su forma de cantar la emparenta con las grandes del blues del pasado -Bessie Smith, Billie Holiday o Janis Joplin- su sentido de la existencia también participa de parecido espíritu. Por ejemplo en su inmensa capacidad para reírse de si misma en sus temas. Es el caso de este fantástico White Trash Girl (Chica basura blanca) del 2004.
Humor que cura. Música terapéutica para toda clase de personas sin falsas pretensiones elitistas. Música que une, no música que separa y clasifica. Riéndose de su corpulencia, de su sobrepeso, de esa cultura de la vulgaridad genuinamente americana. Recientemente ha escrito su autobiografía a la que ha titulado "The Toughest Girl Alive" que ha sido adaptada al teatro y en el 2009 ha sacos al mercado el disco: Superhero. Con este portento vocal como tema principal.
¿Se puede pedir más? Sí, mucho éxito en sus próximas aventuras vitales.
nicolas nageotte
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nicolas nageotte, clarinete.
granja vieira. hestejada de las arts. uzeste. 26 agosto 2012.
Hace 7 horas
julio. todas las revistas feminoides hacen amplio despliege sobre remedios o dietas y dan mil y una pista sobre que hacer para poderse poner un hipermini bikini y arrasar en el arenal. va el dr y nos hace apología dela carnalidad adobada en blues. no me extraña que este blog no tnega version impresa disponible en los kioskos. eso no vende.
ResponderEliminarQué bien suena, no la conocía.
ResponderEliminarY cómo me gusta, sobre todo el sonido tan típico de ese piano.
Ajá te equivocas Jesús, en época de crisis lo que la gente necesita es la opulencia, las carnes abundantes y demás atributos que pierden su fuerza en épocas mejores. Piensa en Rubens en el XVII o en la la crisis del 98 etc... O sease que soy adelantado de lo que se nos viene encima. La buena de Cindye salió en revistas de la época super-mega-ultravixen de Ross Meyer e incluso sus atributos tuvieron su lugar en algún libro de arte de la editorial Taschen.
ResponderEliminarUn sonido alegre y optimista para sobrevivir al verano, Tesa
Genial entrada. Gracias por descubrirme a este portento de la naturaleza(vocal).
ResponderEliminarHa tenido mucho mérito tu entrada ya que con semejantes atributos físicos de esta mujer has conseguido no decir la palabra t...
Le deseo lo mejor a esta magnífica cantante.
Un abrazo.
Hermoso recuerdo de la película de John Waters,y de Candy Kane.
ResponderEliminarCreo que un artista auténtico sobrevive el paso del tiempo.
Estar de moda no en todos los casos implica calidad,es frecuente que los éxitos se deban a una buena mercadotecnia.
Muy inteligente para aprovechar sus atributos esta mujeraza que que presentas en su justa dimensión Doc. Que coma muchos vegetales y si carnes que sean magras para ayudar a su recuperación aunque le tenga que dar un giro al humor.
ResponderEliminarNo sabía de la existencia de esta cantante, creo que tiene méritos en el tipo de música que ella incursionó, por lo menos lo deduzco por los temas que has subido. Trataré de buscar más sobre ella.
ResponderEliminarSaludos,
Muchas gracias Torcuato. No creo que a estas alturas de la película la gente se moleste por el uso de la palabra teta o tetas. Con esas dos letras preciosas que tanto luce en tu nombre.
ResponderEliminarIndudablemente, Carlos. En este momento estoy escuchando a Gardel que falleció, es increíble, en 1935 ¡y sigue vivo!
Bueno esperemos amigo Armando que al menos logre superar definitivamente el cáncer de páncreas que le afectó apenas hace dos años. El humor es genético, se nace o no se nace con él y ella sabe reírse de si misma.
ResponderEliminarTiene una gran voz, Hector será una búsqueda gratificante. Saludos
Hola Doc,
ResponderEliminarno conocía a Candye, así que tu entrada es magnífica para darme a conocer a esta mujer de formas rotundas.
Yo, como buena ex bailarina, me gusta mucho la gente delgada. Eso sí, con formas. Y me gustan los y las deportistas muy estilizadas. Tanto hombres como mujeres. Por ejemplo, no está nada mal Nadal.
Besos.
Vaya con Candye, rotunda en todos los aspectos. Le relaja a uno frente a estéticas tan cuidadas con música cero. Porque lo importante era la música, ¿no?
ResponderEliminarAbrazos.
Tu crees que lo importante es la música, Troglo? Si ahora hasta a las cantantes de ópera las buscan bellas y delgadas. Ya no quieren a mujeres gordas.
ResponderEliminarAmiga Esther, no sería justo que el continente perturbase
ResponderEliminarlo que las mujeres pueden aportar a la música. Y digo mujeres porque a los hombres no se les pide tanto.
Se dice que Chick Webb no quería contratar a Ella Fitzgerald porque la veía muy fea pero ella logró imponerse. Janis era un patito feo en su adolescencia y a pesar de su vida descontrolada resultaba atractiva viéndola cantar de aquella manera.
En el mundo masculino todo ha sido más moderado aunque el aspecto físico, tal como dice Troglo ha servido como plataforma de lanzamiento. El racismo en la música es prueba de ello.
Creo que Candye es muy buena cantante aunque al principio no tuvo más remedio que hacerse un hueco entrando por el lado más sombrío del show-business.